LIVERPOOL.- Aparte que encara una dura sanción por proferir un insulto racista a un rival, el delantero uruguayo Luis Suárez recibió el miércoles un castigo adicional: un partido de suspensión tras haber hecho un gesto obsceno a la afición en un partido de la liga Premier inglesa.
El jugador del Liverpool también deberá pagar una multa equivalente a los 31,000 dólares y se le hizo una advertencia sobre su futura conducta tras haber sido fotografiado cuando mostró el dedo medio a la grada, luego de la derrota de su club ante Fulham, al parecer en dirección a los hinchas del conjunto local.
La sanción es de efecto inmediato, por lo cual margina a Suárez del partido del viernes como locales contra Newcastle.
Liverpool deberá acostumbrarse a la idea de que su principal goleador estará fuera mucho tiempo.
La semana pasada, la Asociación de Fútbol inglesa (FA) le impuso una sanción de ocho partido tras fallar que Suárez profirió un insulto racista a Patrice Evra, zaguero francés del Manchester United en el clásico que los rivales del noroeste inglés empataron 1-1 a mediados de octubre.
El abogado de Suárez expresó la intención de apelar el castigo y tiene hasta el 3 de enero para presentar el recurso.
Suárez aceptó el castigo menor de conducta impropia en lo ocurrido en el partido ante Fulham.
Además, Liverpool deberá pagar una multa de unos 31,000 dólares por los reclamos que sus jugadores le hicieron al árbitro Kevin Friend por haber expulsado al volante Jay Spearing durante el mismo partido.
Sin Suárez, se prevé que Andy Carroll sea el delantero titular en el choque ante Newcastle, el equipo que vendió al ariete a Liverpool por un monto de 56 millones de dólares en enero pasado.
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