TEGUCIGALPA.- Olimpia le ganó 1-0 al Real España en el primer juego de la final del torneo Apertura de la Liga Nacional de Honduras gracias a un gol de Carlos Will Mejía a los 83 minutos de intenso encuentro.
Con esta clara ventaja, Olimpia llegará con menos presión al partido de vuelta a disputarse este sábado en el estadio Morazán de San Pedro Sula. Real España perdió un partido que perfectamente pudo ser una goleada, pero Kevin Hernández y una defensa que se rifó el pecho evitaron lo peor.
Carlos Will Mejía estaba en la banca, y apareció en el segundo tiempo endemoniado para redondearle la tarde a un partido de Olimpia que fue amo y señor desde el primer minutos hasta el final.
Los merengues sacaron ventaja de un primer round que fue de ellos por su eficacia y vitalidad ante un Real España que supo defenderse, pero que también contó con esas dosis de suerte para evitar que la catástrofe futbolística fuera peor.
EL JUEGO
Olimpia fue mejor porque le puso garra al juego , dejó la mejores sensaciones futbolística posibles y ahora llegarán a la costa norte con menos dudas o riesgos para arrebatarle la corona al Real España que en este juego fue un manojo de nervios , que fue dominado, aturdido y vapuleado en la cancha.
El partido comenzó como Danilo Tosello lo había pedido, atacando, acorralando y dejando sin oxígeno a los aurinegros. Intenso, vivo, con dientes de hierro en unos y otros. Más vitalista el Olimpia, más armónico y con el vamos, vamos al frente en 45 minutos donde lo único que le faltó fue el gol para adornar su despliegue y buen sentido de juego.
Atacó siete veces, la pelota entró, pero a los 27 minutos el árbitro pitó fuera de juego. Más adelante la pelota se paseó por toda el área aurinegra, tocó puerta, pero jamás entró.
Quedará en la memoria los tremendos sacudones que vivió el arquero españolista Kevin Hernández, quien voló costado a costado hasta quemar sus guantes, pero imposible en aquel disparo de Carlos Will Mejía, quien cocineó al arquero hasta ver como la pelota se dormía en las redes. .
Ahora se viene una semana intensa, de guerra, de decisiones claras, Real España jugó su peor partido y no tiene nada que excusar, se desdibujó por completo y terminó descarrilado ante un Olimpia inmenso , que sacó su garra, que asfixió con hambre a un rival con señal clara: quieren la copa 24. Y van en serio.
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